Tras recordar que esa inclinación de “las balanzas de control” no solo afecta a la Corte, sino también a la Fiscalía y a la Junta del Banco de la República, en la misiva Pastrana insistió en que no considera que vaya a haber imparcialidad de parte del alto tribunal en el estudio de legalidad que le debe dar al referendo de la reelección presidencial.
“El 90 por ciento de los magistrados son nombrados por el presidente Álvaro Uribe, así éstos sean escogidos por el Congreso de la República”, precisó Pastrana.
Carta
El siguiente es el texto de la carta.
“Señores magistrados:
Desde tiempo atrás he venido advirtiendo sobre el peligro que implica la contaminación de nuestras instituciones por un personalismo presidencial que tiende a desfigurar nuestra Carta Magna para convertirla en una ‘Constitución de bolsillo’. La honorable Corte Constitucional no es ajena al análisis del contagio colombiano en la pandemia personalista de las repúblicas bolivarianas. Lo que está de por medio en este asunto es nada menos que la Constitución de la República de Colombia y las instituciones que de ella dependen.
Las instituciones, por arte de ‘un articulito’, están hoy atiborradas de personajes que llegan a sus cargos por designio directo o circunvalar del Jefe del Estado. En otras palabras, se ha roto el espinazo de la Constitución -sustentado en los pesos y contrapesos- inclinando las balanzas del control, incluido el control constitucional, a favor del Ejecutivo.
“Me he ocupado siempre de estos asuntos desde un plano exclusivamente general y abstracto. Sin mencionar nombres ni juzgar carácter he puesto de presente las consecuencias institucionales de que Fiscal, Procurador, Contralor, Corte Suprema, Corte Constitucional, Junta del Banco de la República etc., sean eventualmente designados por el Presidente o su Congreso. He insistido en que, como en los países vecinos, tras una seguidilla de reelecciones la separación de poderes desaparece efectivamente de la Constitución y el monopolio de poder desemboca inevitablemente en manos del poder presidencial.
“Que la Corte Constitucional es cada día menos independiente del poder presidencial es un hecho, como lo es que el sistema de sorteos y el peso de los votos en las decisiones se inclina, cada día más, a favor de las mayorías del bloque designado por el reelegido Presidente.
“Así, en el asunto de una reforma constitucional signada por un interés particular, con el eventual cambio de un texto leído y firmado por casi cuatro millones de colombianos, el terreno para la suspicacia está abonado. Más aún cuando el Presidente de la Corte Constitucional, contra la actual jurisprudencia, propugna públicamente (entrevista a Cecilia Orozco, El Espectador) que en el referendo para la reelección “el pueblo es soberano”, dando a entender que ahora la ratio decidendi es otra.
Sin otro particular, me suscribo de los honorables magistrados”.
El Nuevo Siglo / 22 de mayo de 2009