J_33_2009

Fuente: Transparencia Internacional- Barómetro Global de la Corrupción, Índice de Percepción de la Corrupción 2009

La organización Transparencia Internacional publicó a mediados de noviembre su informe anual sobre la percepción de la corrupción en el mundo. La posición de Colombia al interior de la medición, es preocupante, puesto que se ha incrementado la creencia ciudadana en el sentido de que las principales instituciones estatales colombianas no son transparentes, y a su interior acontecen prácticas de corrupción. El país descendió en comparación con los demás Estados en el índice de percepción de la corrupción, pasando del puesto 70 al puesto 75 para el presente año.

Llama la atención el hecho de que no sólo en Colombia, sino también a nivel global, los partidos políticos sean el sector que más desconfianza genera, puesto que registran en promedio un 28% de percepción de estar afectados por la corrupción. Por su parte, los medios de comunicación son el sector que menor percepción de corrupción genera. El promedio global de desconfianza, para medios, es del 6%.

Ahora bien, si se examina la situación de Colombia, se encuentra que los partidos políticos cuentan con un 41% de desconfianza, mientras que el Congreso es considerado como una institución corrupta por el 26% de los encuestados. Los funcionarios públicos tienen un 14% de desconfianza, y finalmente, la Rama Judicial tiene una imagen de corrupción del 12%. Todo esto contrasta con la opinión que la población colombiana tiene acerca de las medidas contra la corrupción, adoptadas por el Estado. Esto, dado que el 62% de los colombianos encuestados considera este tipo de medidas como efectivas, mientras que apenas 34% tienen una percepción negativa sobre las mismas. Por ende, es paradójico que a la vez que los colombianos han incrementado su confianza alrededor de la lucha contra la corrupción, a su vez tengan una percepción creciente de desconfianza sobre las instituciones nacionales.

Al comparar la situación nacional con la de otros países y regiones a nivel de instituciones públicas, Chile se presenta como el mejor calificado en la región suramericana y Venezuela como el caso más preocupante. Los países miembros de la Unión Europea y Estados Unidos, como es de esperar, ocupan mejores lugares en el ranking pero reportan índices igualmente alarmantes en materia de partidos políticos y en el poder legislativo, por lo que se hace necesario un esfuerzo normativo, operativo y cultural aún mayor con el fin de superar una de las conductas que actualmente más dinero le cuesta a los Estados a nivel mundial.