Así, quienes están purgando condenas en regiones del país distintas a sus lugares de origen, pueden ser ubicados en cárceles donde estén cerca de sus familias.

“Esta sería una decisión administrativa que podría tomar el Inpec. Si los internos de la nueva carcel tienen cerca su familia, mas se esmeraran por generar un ambiente tranquilo interna y externamente”, manifestó el ministro.

El anuncio se hizo en el marco de la una serie de visitas programadas por este Ministerio para coordinar la remodelación de 11 centros penitenciarios en el país.

“Tendremos cárceles modernas que nada tienen que envidiarles a las norteamericanas y europeas, como se ven en las películas”, recalcó.

El Espectador/ 20 de abril de 2009