El jurista consideró que revivir esa figura es devolverse a la Constitución de 1886.

Ibáñez señaló a los medios de comunicación que “proponer una inmunidad porque exista un desafuero en cuanto a capturas y llamados a indagatoria, es decir que las autoridades están tomando a causa propia algunas decisiones y eso no es cierto”.

Para el presidente de la Corte Suprema lo que debe hacer el Congreso “es cerrar filas para guardar su juez natural: la Corte Suprema de Justicia”.

El magistrado Ibáñez no fue el único que se pronunció contra la propuesta del ministro Valencia.

Los aspirantes presidenciales Rafael Pardo, Gustavo Petro, Aníbal Gaviria, Andrés Felipe Arias, Sergio Fajardo, Alfonso Gómez y Marta Lucía Ramírez rechazaron la idea.

Mientras Ramírez dijo que la propuesta es “equívoca y equivocada”, Pardo señaló que la inmunidad parlamentaria es un ‘caramelito’ que Valencia les manda a los congresistas que tienen investigación preliminar por la Corte Suprema de Justicia, para que voten por el referendo reeleccionista.

Según Pardo, antes de la Constitución del 91 traficantes como Pablo Escobar utilizaban esta inmunidad como mecanismo para evitar ir a la justicia.

Petro dijo que la inmunidad parlamentaria profundizaría mucho más las relaciones entre la política y las mafias. Indicó que si se aprobara esta figura, posiblemente personajes del narcotráfico y paramilitares que no han definido su situación quisieran ser congresistas y quedarían en libertad.

Para Gaviria no tiene ninguna seriedad plantear una reforma constitucional cuando a pupitrazo se aprobó la reforma política, que fue hecha a la medida para algunos parlamentarios.

Arias, por su parte, señaló que a pesar de no conocer totalmente la propuesta de Valencia, no la comparte porque ésta agudizaría el choque de trenes con la Corte Suprema de Justicia y porque se viene un año político de mucha polarización.

En cambio, Fajardo consideró que esta propuesta le hace mucho daño a la democracia porque deteriora la imagen del Congreso, y la calificó como un gran error del Ministro del Interior.

Gómez Méndez precisó que hoy en día esta inmunidad del siglo XIX no tiene ningún sentido, muchos menos en medio de un debate donde hay tantos parlamentarios presos. Agregó que el “Gobierno está enredado con el referendo reeleccionista y de pronto quiere encontrar una solidaridad del Parlamento con esta figura para que le saque adelante su enredado referendo”.