Luego de que la plenaria del Senado aprobara en sexto debate el proyecto de Reforma a la Justicia, la iniciativa tendrá que enfrentar una dura prueba en la Cámara de Representantes durante sus dos debates restantes.

El punto neurálgico de este debate, será muy seguramente la Comisión de Acusación, pues en la Cámara no han estado muy de acuerdo con acabar con ese organismo que pertenece a la corporación.

De igual manera, queda la expectativa sobre como manejará la Cámara el antejuicio político a los altos funcionarios aforados, pues de ellos será la competencia de acusarlos ante el Senado cuando haya un proceso penal o disciplinario en su contra.

La eliminación del Consejo Superior de la Judicatura también dará mucho de qué hablar, pues se espera que los representantes cumplan a cabalidad con los acuerdos a los que se llegó en la Cumbre de Poderes para acabar con esa Alta Colegiatura.

El Gobierno Nacional espera que esta reforma, que le otorga facultades a notarios, abogados, centros de conciliación y otros funcionarios menores para fallar algunos procesos, ayuden a evacuar los más de dos millones de investigaciones que se encuentran represadas.

La iniciativa entrará a estudio de la Comisión Primera de la Cámara en aproximadamente 15 días y a estudio de la plenaria en 30 días.