Entre los retirados se encuentran Andrés Mauricio Gómez Lozano, quien pertenecía al DAS de Bogotá; Ademir Antonio Villanueva Mendoza y Álvaro José Sanclemente Obregón, ahora ex detectives de la seccional Atlántico, capturados el martes 24 de marzo por asaltar una residencia del barrio San Vicente, al norte de Barranquilla.

Estos tres detenidos se encuentran recluidos en la cárcel de Sabanalarga, y están siendo investigados por pertenecer a la banda de apartamenteros llamada ‘Los Rolos’.

El diario El Tiempo aseguró que las indagaciones tienen que ver con irregularidades como filtración de prontuarios criminales, pérdida de armas y drogas, robo de apartamentos y dejar huir al narcotraficante Luis Humberto Angarita Garzón, alias ‘Lucho’, quien luego fue detenido por el propio DAS, el pasado 2 de marzo.

Respecto a este último caso, todo estaba listo para que el organismo de seguridad capturara al capo el 27 de junio de 2008, pero dos detectives, de apellidos Pineda y Suárez, dijeron que no lo habían encontrado.

Una nueva destitución masiva sería anunciada en el transcurso de la semana, añadiéndose a otros despidos realizados en los últimos meses, según la fuente del DAS consultada por la agencia de noticias AFP.

El Tiempo también señaló que uno de los casos más graves por los que se produjo la ‘purga’ se refiere a la filtración de antecedentes penales de paramilitares de extrema derecha.

Un ex jefe de informática de la Institución, Rafael García, fue condenado a 11 años de cárcel por borrar prontuarios de paramilitares y narcotraficantes, entre otros crímenes, y obtuvo una rebaja de la condena por colaboración con la justicia.

En el marco de esa cooperación, García reveló nexos de una treintena de políticos y funcionarios con grupos de ultraderecha.

Escándalo de ‘chuzadas’. El más reciente escándalo en que se ha visto envuelto el DAS comenzó a finales de febrero cuando la revista Semana reveló que el organismo de seguridad realizó escuchas ilegales e interceptó correos electrónicos de políticos opositores, magistrados, periodistas y miembros del gobierno. El presidente Álvaro Uribe negó que hubiera ordenado esas interceptaciones, como sugirió la oposición.

El Heraldo / 22 de abril de 2009