Aprobación de reforma judicial dejó malestar entre las partes. Gobierno define proyectos a tramitar.
Hace muchos años que una legislatura no comenzaba en medio de un clima tan enrarecido entre Gobierno y Congreso. Incluso, el editorial de EL TIEMPO de este domingo señaló que las sesiones comenzarán este viernes cuando “todavía están abiertas las heridas” que dejó la fracasada reforma de la justicia.
Se observa que muchos congresistas tienen mermada su confianza en el Ejecutivo, luego de que este acusó de manera general al Legislativo de no actuar con “transparencia” en el trámite de esa reforma. Inclusive, sugirió que algunos de sus miembros podrían haber procedido en este caso motivados por intereses oscuros, al asegurar que hubo gente de las cárceles que esperaba ese resultado.
Además de minarse la confianza entre Gobierno y Congreso, ambos poderes tratan de ganar terreno frente a la opinión, que los castigó por sus papeles en ese episodio según las últimas encuestas.
Pero como hay que definir tareas, el presidente Juan Manuel Santos convocó para hoy, en San Andrés, un Consejo de Ministros que determinará la agenda legislativa.
Los partidos tienen su propia opinión sobre el asunto. “El proceso de recuperar confianza debe iniciarse, las bancadas deben escuchar la voz del Presidente”, dijo el senador Efraín Cepeda, presidente del conservatismo, quien cree que “el trabajo legislativo será más cuidadoso”.
El representante Augusto Posada, el más probable presidente de la Cámara, aseguró que negar que el ambiente está enrarecido “sería mentira”. Para él, el escándalo desatado con la reforma de la justicia “resquebrajó la confianza, y eso todavía no se ha arreglado”, aunque descartó que haya revanchismos.
“La tensión es inmensa, pero no es solo con el Gobierno, sino con la opinión, (…) habrá personajes del Congreso que tratarán de hacerle la vida imposible al Gobierno para que les den cosas”, dijo el senador Jhon Sudarsky, del Partido Verde.
El propio presidente Santos le dijo a EL TIEMPO el pasado 3 de julio que no radicaría la reforma tributaria si ve que el Congreso “está en una actitud hostil”.
Pero será hoy en San Andrés donde se determinen cuáles serán las iniciativas que se llevarán al Congreso. Entre otros proyectos claves están las reformas tributaria, pensional y de las CAR; la reglamentación de la Consulta Previa y el presupuesto para el 2013.
“Si Santos no presenta esas reformas, querrá decir que no tiene gran interés en una relación con el Congreso”, dijo Armando Benedetti, senador de ‘la U’.
Pero a pesar de todo esto, hay quienes que creen no habrá inconvenientes entre el Legislativo y el Ejecutivo. “La relación entre el Congreso y el Gobierno no será difícil”, vaticinó el representante liberal Guillermo Rivera.
Mientras tanto, en la Casa de Nariño hay quienes creen que las relaciones no están tan deterioradas como las imagina la opinión pública. Si bien estiman que habrá más debates de control político a los ministros, piensan que se impondrá la disposición del Ejecutivo de trabajar de la mano del Congreso.
Lo que dijo el Presidente
“Vamos a realizar un Consejo de Ministros. Por la mañana vamos a discutir con la gobernadora las necesidades más urgentes de San Andrés y Providencia, luego hacerle un seguimiento al cumplimiento de los acuerdos, (…) también vamos a discutir la agenda legislativa y otros temas del Consejo”.