Pedíamos que la elección se hiciera de cara al ciudadano. Que se analizaran los retos de la Fiscalía y de la política criminal, para tener elementos para la escogencia de los nombres. Elección Visible organizó a principios de este año un foro sobre el tema y no asistió ninguno de los funcionarios encargados de la designación.
Varias veces Elección Visible ha resaltado la necesidad de establecer condiciones máximas y no las mínimas exigidas por la Constitución y que se seleccionaran personas sin tacha alguna. Pedimos insistentemente publicar previamente los criterios de selección. Luego de que el Presidente los diera a conocer, cuando el proceso ya estaba avanzado, y al comparar estos con las hojas de vida de sus candidatos hemos encontrado que algunos de los aspirantes no cumplen con los criterios básicos que planteó quien los nominó.
Así como es necesario que el Presidente cumpla sus propios requerimientos, y que ponga a consideración de la Corte tres candidatos con las máximas cualidades y en igualdad de oportunidades para la competencia, es también necesario que la Corte dé a conocer el “test de elegibilidad” que ha aplicado para analizar la terna y para considerarla no viable. Y es también preciso que se vote la terna para demostrar objetivamente su inviabilidad para evitar así que se descalifique a la Corte por no cumplir con su obligación constitucional. Por último: hemos insistido a los candidatos que renuncien para ayudar a destrabar el proceso.
Pero en la elección del fiscal no todo ha sido amargo, pues ha puesto en debate temas importantes para evitar que la situación actual se repita o que se consolide una circunstancia que no beneficie al país: ¿El fiscal debe o no ser penalista o basta con tener conocimientos sólidos en los diferentes procesos penales? ¿Debe o no ser al mismo tiempo gerente y administrador? Y si debe ser penalista y administrador, ¿puede, al mismo tiempo que dirige la institución y la política criminal del Estado, atender repetidamente a audiencias ante la Corte? ¿Es conveniente que un penalista en ejercicio ocupe el cargo y que al concluir su periodo vuelva a litigar? ¿La Fiscalía debe pertenecer al Ejecutivo? ¿El actual proceso de selección hay que reformarlo? ¿Son suficientes los requisitos constitucionales para encontrar al fiscal ideal? ¿Cuál es el verdadero alcance de las funciones de la Corte respecto a la terna? Y, ¿cómo se le puede imprimir a este proceso mayor transparencia? ¿Hasta dónde va la autonomía del fiscal frente al presidente, con quien comparte la dirección de la política criminal?
Elección Visible quiere hacer un nuevo llamado al Presidente, a la Corte y a los candidatos. “Señor Presidente y señores magistrados, ustedes antes de apelar a sus competencias, fueros y legitimidades, deben desarrollar el principio de la Colaboración Armónica. No todo está acabado y aún tienen la posibilidad de escoger al fiscal que Colombia necesita. Deben llegar a un acuerdo, deben hablar y deben oírse. Y recuerden que está en sus manos escoger a la persona que debe ser.
“Son ustedes quienes deben tomar una decisión correcta y oportuna. Los candidatos deben renunciar, demuestren dignidad y cordura, y acepten sus propias competencias y limitaciones, pues no todos los abogados tienen calidades para ser fiscal”.
Por Gloria María Borrero Restrepo,
Dir. Corporación Excelencia en la Justicia.