Los ponentes de la Reforma a la Justicia acordaron que para el juzgamiento de los aforados constitucionales no se creará una “Supercorte” como quedó planteado durante el trámite del proyecto en la Cámara de Representantes.
En la ponencia de la iniciativa se acordó la creación de dos nuevas salas en la Corte Suprema de Justicia, una para la investigación y otra para el juzgamiento en primera instancia de los altos funcionarios. La segunda instancia estará a cargo de la sala penal de la Alta Corporación.
El presidente de la Comisión Primera de Senado, Luis Fernando Velasco, dijo que sensato dejar en la Corte Suprema el juzgamiento de los aforados.
“No queremos crear más Supercortes ni crear una Corte por encima ni al Consejo de Estado, ni a la Corte Suprema de Justicia, respetamos lo que ha venido haciendo como trabajo la Corte Suprema y le mantenemos la confianza como organismo de cierre en materia penal a la Sala de Casación Penal”, señaló Velasco.
Los magistrados de la Sala de Investigación serán postulados por el presidente de la República y la elegirá la Corte Constitucional y los de la Sala de Juzgamiento en primera instancia, serán nombrados por la misma Corte.
En la ponencia también se acordó que las facultades que se le entregarán a notarios, abogados y otros funcionarios para fallar en algunos procesos judiciales, serán temporales por un máximo de 7 años, para descongestionar la justicia.