En diálogo con EL TIEMPO, Borrero dijo que existe un desmonte programado del sistema penal acusatorio.
¿Las propuestas de reforma resuelven los problemas de la justicia?
Decididamente, no, y hay que hacerle una pedagogía a la ciudadanía para que no se lleve falsas expectativas. La solución de problemas de la justicia son complejos y no pasan solamente por una reforma constitucional.
¿Qué opina de las críticas de la Fiscal al sistema penal acusatorio?
Aquí lo que viene es un desmonte programado del sistema penal acusatorio desde varias autoridades. Hay que prender las alertas. La Fiscal dice que el sistema anterior era más eficiente que este; no lo creo. Las cifras no son así. Colombia va a perder un esfuerzo de siete años, muchos recursos y capital humano formado. Nos estamos devolviendo a pasos agigantados.
¿Debe seguir el Consejo Superior de la Judicatura o no?
La propuesta del Consejo de Estado no nos gusta porque es dejar las cosas tal cual están. Solo que constitucionaliza como sala de gobierno la actual Comisión Interinstitucional. Nos gusta más la del Gobierno, pero con observaciones. Sé que están buscando un diseño parecido al del Banco de la República; creemos que hay que ensayarlo.
¿Cómo ve el tema de la doble instancia para aforados?
Es una necesidad. Los colombianos, sin ninguna distinción, deberían tener todas las garantías procesales. Hay consenso entre muchos académicos, pero no en la opinión pública. En algunos medios se dice que es darles prebendas a los políticos. Yo creo que esto puede dañar la propuesta, por una presión injustificada de ciertos sectores de Colombia.
¿Cuál sería la fórmula más conveniente?
La propuesta que le gusta a la corporación es la de la Fiscal: que la investigación esté en la Fiscalía, pero la primera y la segunda instancia no deben estar en el mismo órgano porque ahí no se cumple la garantía constitucional.
Otro tema gordo es la tutela. ¿En las propuestas que hay se resuelve el asunto?
A la corporación le gusta más la propuesta del Gobierno. La tutela tiene que volver a ser un mecanismo excepcional, como lo quiso el constituyente de 1991.
¿Y en lo que tiene que ver con la tutela contra sentencias?
Las cortes todavía están muy lejos de aceptar que la Constitución establezca de manera expresa que haya tutela contra sentencias. Lo que considera la corporación es que la solución que trata de darle el Gobierno es acertada porque parte de una cosa: reconocemos que sí hay tutela contra sentencias, que es lo que viene ocurriendo en el país.
¿Qué opina de quitarles a las cortes la elección del Procurador y el Contralor?
Se están atendiendo solicitudes de las cortes. Ellos no querían esas funciones. Excepto la del Fiscal, porque la Fiscalía hace parte de la Rama Judicial. Desde la época de la Comisión de Expertos se hablaba de que la elección de Contralor y Procurador había politizado a las cortes y, coyunturalmente, la del Fiscal.
¿Existe el riesgo de que se afecte la investigación contra congresistas?
Para mí, esa es una disculpa para no cambiar. Creo que el país es lo suficientemente maduro. Somos más las personas que tenemos los ojos alerta. Ustedes los medios juegan un papel fundamental.
‘Reforma no puede ser fiasco’
Quince años después, CEJ es centro de pensamiento
Gloria María Borrero aseguró que celebrará los 15 años de la Corporación Excelencia en la Justicia (CEJ) con dos grandes retos: la vigilancia del trámite de reforma de la justicia en el Congreso y la implementación del nuevo Código Contencioso Administrativo. “No se puede quedar en otro fiasco, como el sistema penal acusatorio”, dijo. Según la abogada, la entidad se ha fortalecido como centro de pensamiento de justicia. “Logramos interesar a empresarios, gremios, abogados en que la justicia nos importa a todos”, afirmó.