Un agente 001 le preguntó a Iguarán:

– ¿Es cierto que se va para Austria?

– No, no es verdad.

– ¿Cuál será el origen de la versión?

– Especulaciones.

– ¿Usted habla alemán?

– Sí, en alemán hice mi maestría.

– ¿Y entonces qué hará?

– Por razones de seguridad, voy al exterior.

– ¿Como embajador?

– Eso depende del presidente.

– ¿Y si no lo nombran?

– Buscaré una beca.

– Pero, ¿con toda su familia?

– Sí, con mi familia?

– ¿Y de qué vivirán?

– Haré una o dos asesorías.

Estando como están las relaciones entre el fiscal Iguarán y el presidente (medio chuecas), no parece que haya embajada a la vista.

CM& / 03 de junio de 2009