Socha Salamanca llegó a la Corte desde hace dos años y lleva 36 años al servicio de la justicia. Se ha desempeñado como juez promiscuo y también como magistrado del Tribunal de Bogotá.
Con respecto a la denominada ‘parapolítica’, Socha dijo que al igual que a las otras 23 competencias que tiene la Sala de Casación Penal tendrá el curso que le ha venido imprimiendo la Sala.
“Son procesos donde la mayoría están definidos y otros con resolución de acusación y algunas indagaciones de carácter preliminar, estos desde luego deben desarrollarse porque el cambio de presidente no significa ninguna variación en ese aspecto”, subrayó.
En la vicepresidente fue elegido Leonidas Bustos, quien no lleva mucho tiempo en la corporación. Los retos que le esperan a los nuevos funcionarios están relacionados con la ‘parapolítica’, la ‘farcpolítica’ y ‘yidispolítica’. “Lo que se pretende es seguir la convicción de la sala de servicio a la justicia y ratificar su responsabilidad ante la sociedad”, resaltó Socha.
A partir del próximo lunes 19 cuando entre en vigencia la labor de Socha como presidente de la Sala, ésta reanudará sus funciones después de la vacancia judicial con el juicio que llevan contra Guillrmo León Valencia Cossio, ex director de Fiscalías de Medellìn, por seis delitos.
El Espectador / 15 de enero de 2009