Para el doctor Sintura no existen razones que justifique la permanencia de la fiscalía en la rama judicial, porque el en el esquema que hay la función de acusación no es jurisdiccional.
“No es descabellada esa propuesta, no es nueva esa iniciativa partió de la reforma constitucional de 1991 en el Gobierno del presidente Gaviria, señalo el abogado.
También preciso que es un régimen que opera en países como Inglaterra, Canadá, Nueva Zelandia, México, Brasil, Honk Kong y los Estados Unidos, que tienen un sistema que el fiscal es elegido por el ejecutivo.
Lo que pasa es que “El proyecto se presenta en una coyuntura difícil, pero es un proyecto que hay que estudiarlo con mesura con cuidado y con tranquilidad”, puntualizó el ex fiscal Francisco José Sintura.
Por su parte de la directora de la Corporación Excelencia en la Justicia, Gloria Borrero indicó que desde que la entidad a su cargo empezó a mover el tema del sistema penal acusatorio venía proponiendo que la fiscalía saliera de la rama judicial.
“Realmente tenemos muy claras las razones por las cuales no debe pertenecer a la rama judicial, porque esta ocasionando muchísimos problemas, primero porque los fiscales se creen todavía jueces, todavía tenemos rezagos de la ley 600 que un fiscal toma decisiones jurisdiccional parecidas a las de los jueces de control de garantías y eso hace que la organización de la fiscalía sea difícil” enfatizó la doctora Borrero.
Dijo además que la fiscalía no es una institución jerarquizada porque realmente el fiscal no tiene mando sobre los fiscales y porque los fiscales se creen independientes, son ruedas sueltas.
La directora de la corporación excelencia en la justicia concluyó que hay una desarticulación de la política criminal, el fiscal también se cree independiente y no coordina, ni le da insumos al ejecutivo para coordinar y diseñar la política criminal.