Publicado por EL ESPACIO
Una vez más, la Misión de Observación Electoral, MOE, puso en el ojo del huracán y en calzas prietas a un sector del la dirigencia política y la justicia colombiana.
El hecho se registra por la polémica que ha encendido el proceso de elección del Procurador General de la Nación, con la casi cantada reelección de Alejandro Ordóñez Maldonado en la plenaria del Senado.
Sobre el particular, Alejandra Barrios, directoras del MOE, hizo llegar al despacho de los magistrados de la Corte Suprema de Justicia –tribunal que ternó a Ordóñez– un derecho de petición para que aclaren qué familiares (hasta en cuarto grado de consanguinidad) han trabajado en la Procuraduría desde 2008 hasta hoy.
Es decir, deberán precisar si tienen a sus esposas, sus hijos, hasta sus primos, dentro del Ministerio Público en algún cargo.
Igualmente, la MOE llamó a que los ciudadanos en las regiones den a conocer si los senadores, quienes deben elegir al Procurador, tienen a sus familiares o amigos en la Procuraduría.
“Estamos invitando a que los ciudadanos hagan llegar información sobre los procuradores o funcionarios de alto nivel de la Procuraduría que se encuentran en las regiones que sean cuotas políticas de senadores”, explicó Barrios.
‘Pildoritas para la memoria’
En el mismo sentido, la MOE envió un derecho de petición a la Procuraduría para que señale de manera específica cuáles son los senadores que tienen abierta investigación disciplinaria para saber cuántos legisladores deben declararse impedidos en el proceso de elección.
Gloria María Borrero, vocera de Elección Visible, una coalición de 13 organizaciones de la sociedad civil que hace dos meses se unieron para atajar la extinta reforma a la justicia, afirmó que la elección del procurador Ordóñez es una burla a la Constitución.