altEl martes se escogerá al primero de dos magistrados de la Corte Constitucional.

Pocas veces como en esta oportunidad la elección de dos magistrados a la Corte Constitucional había llamado tanto la atención en el país. Los electores, los senadores de la República, no se encontraban tan mal posicionados en su credibilidad como lo están ahora, luego del escándalo por la reforma a la justicia.

La primera cita para una de esas selecciones será el próximo martes, cuando la plenaria del Senado votará entre los juristas Luis Guillermo Guerrero, Carlos Medellín Becerra y Marta Victoria Sáchica, para reemplazar a Juan Carlos Henao, quien renunció para ser el rector de la Universidad Externado de Colombia.

La elección llama la atención porque desde el inicio de este período de sesiones grupos de senadores, al igual que sectores públicos y ONG, han pedido que ese proceso se haga transparente, de frente a los colombianos y sin ningún acuerdo oculto.

Eso último, el riesgo de que el nuevo magistrado salga de un acuerdo de las grandes mayorías, es lo que tiene con las alarmas prendidas a organizaciones como la Misión de Observación Electoral, Corporación Nuevo Arco Iris, Fundación Foro Nacional por Colombia y Transparencia por Colombia, quienes consideran que la elección de Gregorio Eljach como secretario general del Senado es un mal precedente, porque los congresistas, pese a que hablaron de escogerlo con voto nominal y público, finalmente desistieron de ir por esa vía.

La preocupación de estas organizaciones es porque al Senado en este semestre le queda la elección del nuevo Procurador General de la Nación (se espera que sea en diciembre), mientras la Cámara hará lo propio por el Defensor del Pueblo.

“En aras de garantizar transparencia y la responsabilidad política, dichas elecciones deben contar con votación nominal y pública, ser trasmitidas en directo por televisión y antecedidas de audiencia públicas a las que sí asistan los congresistas”, indicaron en un pronunciamiento las organizaciones antes mencionadas.

La votación del martes cumplirá casi todo lo pedido: la audiencia pública en que se presentaron los candidatos ya la hubo, el miércoles de esta semana; fue transmitida en directo por el Canal Institucional y para el 14 de agosto está programada la transmisión de la plenaria en directo; pero lo que no sucederá es una votación nominal y pública.

BARRERAS APOYA EL VOTO SECRETO
El presidente del Senado, Roy Barreras, considera que una elección tan importante como la que se hará para escoger el magistrado de la Corte Constitucional debe dar todas las garantías, tanto para el país, como para quien tiene la responsabilidad de escogerlo: “La elección de un magistrado de la Corte Constitucional es especial; es una de las más altas decisiones para una República, nada menos que el guardián de la Corte Constitucional, por eso hay que ser supremamente celosos y profundos en la toma de la decisión, que tiene que ver con el equilibrio político e ideológico de la corte responsable de decidir en últimas los derechos y deberes de todos los colombianos”.

Hace una semana cuando la plenaria escogió a Eljach como su secretario, Barreras tomó una posición similar, que se diera una audiencia, que hablaran los candidatos y que los senadores votaran libremente sin presiones y en secreto: “Pienso que la elección, respetando la decisión autónoma de los partidos, debería ser una votación libre, individual y secreta, una votación que responda en conciencia de cada honorable senador, más allá de acuerdos políticos, más allá de presión externa sobre los senadores”.

Una posición diferente tiene su compañero de bancada y presidente del Partido de la U, Juan Lozano, quien asegura que si cada senador vota de manera nominal y pública se hará un acto de transparencia y no de figuración, como se ha dicho.

Incluso, Lozano llama ese voto público como una responsabilidad que tienen los congresistas para con sus electores, por eso fue que su votación por secretario la hizo pública, aunque sufragó en blanco.

Las posiciones de Barreras y Lozano anticipan una tensión que se verá en la mañana del martes, cuando las bancadas de cada partido se reúnan para definir a quién apoyar o para dejar en libertad a sus senadores.

Para Barreras, el problema no es sólo de querer o no hacerlo transparente, sino de respetar la ley: “El sentido original del voto secreto en las democracias es garantizar que los ciudadanos voten libremente y sin presiones y ningún caso de más alta responsabilidad como este”.

ENTRE LA LEY Y LA TRANSPARENCIA
Para el vocero del Partido Verde, senador John Sudarsky, quien es el autor de la recién sancionada ley sobre participación ciudadana, siempre será necesario que los congresistas hagan los más públicas y transparentes sus actuaciones, aunque así no lo precise la ley.

Sudarsky considera que el Senado está dando pasos para hacer más transparentes sus actos, y que así comenzó con la votación del secretario general, en donde hubo una audiencia pública y varios senadores votaron abiertamente.

Incluso, anticipó que promoverá que se mantenga el mismo mecanismo para votar por el Procurador General de la Nación: “Me parece fundamental que haya el debate con los candidatos a procurador y magistrado de la Corte Constitucional”.

Señala que el problema fundamental del Congreso es que el Artículo 33 del reglamento señala que los senadores y representantes son responsables ante los electores y si existe un obstáculo entre ellos y los congresistas, se podría considerar esa situación como inconstitucional, por lo que insiste en la transparencia.

En opinión del senador conservador José Darío Salazar, lo que deben hacer el martes en la plenaria es simplemente acogerse a la Constitución y al reglamento del Congreso: “La votación debe ser secreta, lo dice la Constitución Nacional, y también la Ley Quinta, las leyes se votan públicamente, pero en los casos de designar y elegir será votación secreta, se debe acatar la ley”.

Al negar supuestas presiones para votar por algún candidato en particular, el segundo vicepresidente del Senado, Édgar Espíndola, considera que la elección será libre: “Si hubiera habido presión, seguramente no se habría escuchado a los magistrados, pero tuvimos la suerte que así pasara, en el caso del Partido de Integración Nacional (en el cual milita) nos reuniremos temprano para definir una posición”.

Pero el vocero de los verdes sostiene que sí ha escuchado que se han dado precisiones a algunos senadores, aunque en particular a él no le han ejercido ninguna, por votar de forma abierta, “siempre prefiero que sea nominal y pública”.

El Congreso tiene por delante unos meses en los que decidirá la selección de funcionarios claves en distintos organismos de control, como también la aprobación de leyes y reformas. Todos sus procesos requerirán transparencia y vincular más a la opinión pública, si quiere torcer la imagen negativa que hace años lo acompaña.